Tantra y sexología. Introducción.

El Tantra y la sexología, aunque muy diferentes en sus propósitos y concepciones sobre la sexualidad (uno es espiritual, el otro experimental) coinciden en ciertas áreas.
La sexología es la ciencia médica destinada a estudiar la sexualidad humana y sus, normales o anormales, manifestaciones físicas, fisiológicas y sicológicas. Su enfoque se podría considerar “horizontal”, Muy diferente del enfoque “vertical” de lo erótico promovido por el Tantra.

Desde el punto de vista tántrico, la sexualidad es considerada el "cerebro" que procesa las transformaciones alquímicas de las substancias sexuales en la energía. Por consiguiente, puede decirse que el Tantra empieza en la frontera de la sexualidad, y continúa adelante. Es más, la sexología da muchas descripciones de experiencias orgásmicas que realmente se parecen a los estados especiales de conciencia descritos en el Tantra, pero ahí se estanca, en la descripción. El Tantra pretende "elevar" esos estados de conciencia mediante el control de la energía vital, La raíz del Tantra es una sexualidad sana en un cuerpo y una mente sanos, el control de la energía sexual para utilizarla en el crecimiento espiritual.





Hay que partir de la realidad actual del hombre y la mujer, conocer como somos y no pensar cómo quisieramos ser: “ el hombre se impresiona fácilmente por la belleza del cuerpo femenino y aprecia esto mucho en una mujer; la mujer puede amar a un hombre por su inteligencia, o por la protección que él podría ofrecerla, pero un hombre siempre apreciará más la inteligencia de una mujer si combina con la belleza ".
Las reacciones de un hombre son sensiblemente diferentes de aquéllas de una mujer; cuando una mujer admira a un hombre, y él intenta seducirla, su apariencia física no es tan importante para ella. El amor que un hombre tiene para una mujer, sin embargo, es inseparable del deseo. Y a más bella la mujer, mayor el deseo.

El erotismo enciende la chispa de los sentidos, para que ellos causen el fuego de la unión, el hombre se nutre por la belleza del cuerpo de la mujer, y la mujer no está equivocada al conceder tanta importancia a este aspecto. ¿No es cierto que el cuerpo de la mujer fue creado, en todos sus detalles, para causar la admiración y el deseo de los hombres.?. Sin embargo, ese fuego debe ser comprendido y alimentado correctamente, precisamente para que su "calor" pueda ascender por los centros de energía del cuerpo humano,(chakras, Tan-Tienes,etc)y colaborar en el crecimiento espiritual. No se trata de desperdiciar la energía en orgías sino de mantenerla y utilizarla espiritualmente, para evolucionar del sexo al amor.

Acorde con la tradición contemporánea y para alcanzar una profunda armonía sexual, es importante considerar los siguientes aspectos:

suprimir cualquier tabú sexual
ser conscientes del área genital
sentir la aspiración de crecimiento espiritual, aspirar hacia un erotismo espiritual
ser consciente de los propios sentimientos, físicos y psíquicos
fortalecer los músculos íntimos
el conocimiento del hecho de que la mujer tiene un papel más activo durante el acto sexual.

Los especialistas en sexología definen el orgasmo como "un estado de catalepsia, acompañado por la pérdida temporal del contacto con la realidad". El Tantra considera el orgasmo como un estado beneficioso de expansión de la conciencia en que las limitaciones habituales del ser humano desaparecen, la mente se reduce para imponer silencio, y uno experimenta el éxtasis.

El abandono completo, la trascendencia de tiempo y espacio, el estado de unificarse con el otro, éstas y otras cosas asimilan el orgasmo con una experiencia metafísica. Por esto, en Tantra, la “iluminación " se denomina también el orgasmo "cósmico”.

El orgasmo

Desde el punto de vista Tántrico, la sexología es el horno de la alquímica transformación de la energía y la conciencia, de su expansión empezando por el cuerpo, y, especialmente, más allá del cuerpo. En realidad, el TANTRA empieza donde la sexología termina, sin embargo ésta última nos presenta a veces realidades, o experiencias orgásmicas, que son curiosamente parecidas con algunas de las afirmaciones del TANTRA YOGA. Por esto hemos juzgado conveniente empezar la exposición de los temas en un lenguaje sexológico, porque de esta manera es más fácil de entender por la mentalidad occidental y no nos aleja demasiado de la realidad tal como es expuesta en los textos Tántricos.

LA CURVA DEL PLACER

Los sexólogos definen el orgasmo, en una forma nada poética, como “un trance, con pérdida del sentido de la realidad; el TANTRA lo explica como un feliz estado de expansión de la conciencia, en la que los usuales límites del ego desaparecen repentinamente, la tiranía de la mente se suspende, y el sujeto cae en el vértigo del vacío. Por un corto período se descubre el abandono, la muerte del ego, la desaparición del tiempo, y se empapa de Unidad, lo que le sitúa en idénticas condiciones que la experiencia metafísica; de ahí que, en términos de TANTRA, a menudo la Iluminación es llamada “el orgasmo cósmico”.
El proceso del orgasmo en una experiencia sexual común podría ser dibujado como una curva con cuatro segmentos

Fase 1: Excitación
En la primera fase, los juegos sensuales hacer surgir el deseo y generan la excitación. Esto se materializa en la erección del hombre y la lubricación de la vagina de la mujer.

Fase 2: Carga
La tensión sexual provoca el aumento del ritmo de la respiración, pulso y presión sanguínea. Estas reacciones generan un sentimiento de tensión, de mayor tono vital.

Fase 3: Orgasmo
Esta fase se caracteriza por la pérdida del ego. La excitación, previamente centrada en el área genital empieza a extenderse por todo el cuerpo, subiéndo hacia la cabeza. Si en este momento, que se llama “el punto de no retorno” se produce una pérdida del control consciente -como sucede en la mayor parte de los casos-, se producen una serie de contracciones reflejas en todos los músculos que rodean los órganos genitales y el ano (músculos pélvicos, músculos del perineo, esfínteres anales, la próstata en los hombres, los músculos vaginales y uterinos en las mujeres, los elevadores del ano,). Estas contracciones llevan a la eyaculación del hombre y a una explosión de secreciones vaginales en las mujer, que se considera una especie de eyaculación.




Fase 4: Resolución
El cuerpo se calma, mientras que la conciencia mental se alza de nuevo. Las sensaciones de la etapa orgásmica pueden persistir un tiempo, como suaves olas o vibraciones. Debido a la gran pérdida de energía que ocurre durante la eyaculación, durante este período cualquier estimulación hacia un nuevo orgasmo es imposible; este “período de espera” es más largo en el caso de los hombres (cinco minutos o más) que en el de las mujeres (de pocos segundo a una hora). La realidad es que hay muchas mujeres que, debido a su enorme potencia telúrica, pueden tener muchos orgasmos simultáneos si sus parejas no esperan a la completa resolución de esta etapa para reiniciar el juego sexual.

Hay que enfatizar en las diferencias de ritmo entre el hombre y la mujer, que hacen que la naturaleza del orgasmo femenino sea más bien implosiva, mientras que el del hombre tiene una naturaleza explosiva. Debido a las diferencias en el factor tiempo (es decir, el hombre alcanza el orgasmo antes que la mujer) aparece obvio que es necesario para los hombres controlar a voluntad, retrasar o eliminar la eyaculación. Verdaderamente es precisamente la eyaculación la diferencia esencial, porque la explosiva pérdida de substancias básicas crea un auténtico “apagón eléctrico”, una especie de pérdida de conexión con la fuente de energía que es seguida de una falsa relajación, que no es sino producto del agotamiento. La mujer, por naturaleza, está mucho más próxima al orgasmo Tántrico, una clase de “orgasmo sin eyaculación”, que puede ser prolongado por un espacio de tiempo casi indefinido, y que no se manifiesta sólo en el área genital, sino como ondas vibratorias en todo el ser. Es interesante comentar aquí que los hombres del tipo “macho” buscan eyacular a toda costa y son los más difíciles de convencer para que controlen su energía sexual, mientras que los más femeninos (que no entendemos como aberrantes o invertidos patológicos), a menudo prefieren no eyacular y extender sus orgasmos.

Clases de orgasmo

La importancia para el TANTRA del estudio de las varias formas de orgasmo viene del hecho de que algunas de esas formas son típicamente Tántricas –lo que significa que son el trampolín hacia estados superiores de conciencia- y, por tanto, deben ser despertadas, activadas y amplificadas de una manera especial en el ser de los practicantes.
La primera categorización de las clases de orgasmo, (válida para hombre y mujer) es: orgasmo superficial y orgasmo profundo.




EL ORGASMO SUPERFICIAL es un acto reflejo, un fenómeno genital que se manifiesta por contracciones rítmicas de los músculos del perineo. En el caso de las mujeres, se desencadena por estimulaciones en las zonas erógenas extravaginales, especialmente el clítoris. Está asociado con el estiramiento de los músculos de los muslos y el bajo abdomen, con un sentimiento de miedo, tensión psíquica, una inmovilidad expectativa, y el desesperado intento de alcanzar el orgasmo. A menudo es acompañado por una sensación de presión en los músculos, como un apretón que viene junto con el impulso de descargar rápido, o expulsar algo tan rápido como sea posible, al igual que en un estornudo. Realmente, algunas mujeres que experimentan esta clase de orgasmo observan a menudo la descarga de gas de los intestinos o la vagina (si lo hubiese) e incluso orina por la uretra.
Esta forma de orgasmo esta asociada a menudo con tendencias egoístas y con la masturbación (también en los hombres), y es muy frecuente hoy en día. Está localizada casi exclusivamente en el nivel del área genital y por tanto es parcial e incompleta ya que no se extiende a todo el ser, a menudo es insatisfactoria y deja detrás un sentimiento de frustración.

EL ORGASMO PROFUNDO es una forma más completa de orgasmo asociado en el caso de la mujer con profundas estimulaciones vaginales y que frecuentemente presenta aspectos como: fases de paroxismo (gritos, lágrimas, contener la respiración), profundas ondulaciones de los músculos vaginal y uterino que se extienden a todo el cuerpo, incluso a la cabeza, y un profundo sentimiento de satisfacción y relajación. Esta forma de orgasmo de pende en gran medida de la simultánea estimulación de todas las zonas erógenas; de esta manera pierde su carácter genital y se extiende a todo el cuerpo.

Hay otra forma de clasificar los orgasmos. Está conectada con una graduación jerárquica que corresponde a los tres GUNAS del YOGA:
TAMAS, el orgasmo ciego e inconsciente
RAJAS, el orgasmo dinámico, pasional, y
SATTVA, el sutil orgasmo meditativo, sin eyaculación.
De aquí las cinco formas de orgasmo son:

1. EL ORGASMO CLITORIDIANO, que es local, superficial, externo y da una falsa sensación de seguridad al principio, porque está conectado con la idea de que no se depende de otro. Acorde con el TANTRA está asociado con el predominio de la energía lunar, y por tanto, las personas que sólo experimentan este tipo de orgasmo desarrollan un exceso de energía lunar con las correspondientes consecuencias.También está conectado con la energía de un chacra secundario llamado el YONI CHAKRA, y es muy difícil de controlar. Este orgasmo hoy en día es muy frecuente en la mujer debido a la tendencia de recomendarlo en la llamada “educación sexual” . Pero acorde con el TANTRA esto es un error, esto forma de orgasmo debe, a veces, ser conectada con otras como el vaginal

EL ORGASMO VAGINAL, tiene dos diferentes formas:

2.EL BAJO ORGASMO VAGINAL, se sitúa en el área del perineo, a la entrada de la vagina y es todavía bastante externo e incompleto. Al estar conectado al chakra MULADHARA su salvaje energía le hace problemático en lo que concierne a su control.

3.EL NORMAL (PROFUNDO) ORGASMO VAGINAL , que está conectado con la energía del CHAKRA SVADHISHTHANA, y es todavía mucho más profundo, completo, y satisfactorio. Según el TANTRA muestra un predominio de energía solar. Desgraciadamente, debido a la falta de instrucción, muchas mujeres no lo alcanzan en toda su vida. Esta clase de orgasmo se manifiesta en fuertes contracciones vaginales y frecuentemente es acompañado por una considerable descarga de fluidos sexuales, el orgasmo relacionado con el famoso “punto G”, (llamado así por Graffenberg, el moderno sexologista que supuestamente redescubrió este conocimiento de la edad antigua), también se incluye aquí

4.EL ORGASMO CERVICO-UTERINO es el típico orgasmo tántrico, aunque bastante poco frecuente. Cuando la estimulación vaginal y las contracciones son suficientemente fuertes y profundas, suben hacia la cervix y el útero y se transforman en vibraciones largas y suaves, que se extienden a todo el cuerpo, principalmente hacia la cabeza. A veces se convierte en una especie de orgasmo “fuera del cuerpo”, que puede llevar a formas de éxtasis, puesto que esta energía puede ser sentida fuera del cuerpo físico como un fluido. Este orgasmo puede ser controlado casi por sí mismo y abre el camino de la energía sexual desde SVADHISHTHANA CHAKRA hacia los chakras superiores. A veces la liberación de este tipo de orgasmo requiere para la mujer un compañero que posea unos organos sexuales de tamaño suficiente. Si esto no sucede, se puede cambiar la forma de los órganos sexuales del hombre o adoptar posiciones más adecuadas para una profunda penetración.
También, y ya que esta forma de orgasmo es altamente sutil, las mujeres, también las que nunca lo han experimentado antes, pueden aprender a producirlo voluntariamente, incluso sin estimulación directa, con una adecuada concentración. El perfecto control sobre los músculos vaginales es de la máxima importancia para ello. Este orgasmo es el trampolín para más altos estados de conciencia.

5.EL ORGASMO ANAL, sucede por el hecho de que hay nervios erógenos en el área del ano, que son especialmente sensitivos en el caso de algunas personas; sin embargo, es de mencionar que esta información no supone ningún apoyo Tántrico a la homosexualidad masculina. Esta forma de orgasmo procede del masaje interno del ano, hasta el sacro en las mujeres, hasta la próstata en los hombres. En el caso de las mujeres requiere mucha relajación, y confianza, al principio. Las energías liberadas por esta clase de orgasmo son bastante groseras y difíciles de controlar.
Generalmente se advierte a los principiantes evitar tratar con esta forma de orgasmo (a menos que haya previamente una tendencia hacia él) porque está conectado con energías que tienen una muy baja frecuencia de vibración y le pueden poner en contacto con espacios sicológicos, o niveles de conciencia contaminados, llamados a veces “tendencias anales” por la psicología.
Aunque la mayor parte del tema ha sido tratado desde el punto de vista de la mujer, lo mismo es aplicable al hombre, aunque es cierto que el tema es más importante para las mujeres en el camino del auto-conocimiento y la liberación.

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